Estudios Fase 1 de Roche impulsan la investigación médica de vanguardia en México Tecnologia por Vicente Anguiano / Redacción - mayo 20, 2025mayo 20, 20250 Contar con la infraestructura, los marcos regulatorios, la capacidad y experiencia científica necesaria para conducir estudios clínicos fase 1 —aquellos en los que un fármaco se administra por primera vez en humanos (first in human)— es mucho más que una cuestión de investigación avanzada. Es un reflejo del grado de sofisticación, confianza y madurez de un sistema de salud, un ecosistema regulatorio robusto y una comunidad científica de alto nivel. Ese es el punto al que está llegando México y que ha permitido a Roche traer en los primeros meses de este año dos estudios fase 1, en lupus y MASH (enfermedad hepática esteatósica asociada a disfunción metabólica) y que se suman a los tres de la misma fase clínica que se desarrollaron el año pasado (lupus, cáncer de pulmón y esclerosis múltiple). Para Roche México “conducir un estudio fase 1 – first in human, como es el caso de lupus- implica una inversión significativa: en capacitación de profesionales, fortalecimiento institucional, tecnología de vanguardia, procesos éticos rigurosos y monitoreo continuo. Refuerza también nuestro compromiso con México, en donde hacemos investigación clínica desde hace 28 años, y la voluntad de trabajar codo a codo con autoridades, investigadores, hospitales y comunidades. En otras palabras: significa seguir apostando por el país”, afirmó Daniele Galbiatti, directora de Investigación Clínica de Roche México. Y es que la investigación clínica no solo permite mantener la excelencia de la ciencia mexicana, mejorar la calidad de vida de los y los pacientes, sino que genera un importante retorno de inversión para México que puede ir de los 5 USD 1 hasta 25 USD 2 por cada dólar invertido y que se ve reflejado en: ● Mejoras en la salud de la población, ahorros en costos para el sistema de salud y beneficios económicos derivados de la innovación y la creación de empleo en el sector de la investigación médica. ● Creación de empleos calificados, mejora de infraestructuras y la atracción de inversiones adicionales. ● La participación en estudios clínicos permite a los investigadores y el sistema de salud tener contacto temprano con innovaciones terapéuticas y mejorar la capacitación del personal médico. ● Ser un destino para estudios clínicos de fase 1 posiciona al país como líder en investigación médica, atrayendo futuras colaboraciones y proyectos. “México recibe sólo el 2% de todos los pacientes de investigación clínica del mundo, pero en Roche creemos firmemente en el potencial que tenemos como país para ser un hub de investigación clínica no solo regional, sino mundial. De ahí que solo el año pasado hayamos traído 68 estudios clínicos e invertido más 500 millones de pesos en esta área y, si las condiciones regulatorias son óptimas podríamos invertir alrededor 4000 millones de pesos en los siguientes cinco años solo en investigación clínica”, señaló Daniele Galbiatti. México tiene una visión de futuro para convertirse en una potencia de innovación e investigación científica de la que Roche se siente honrado de ser uno de sus principales aliados en materia de investigación clínica, porque donde otros apenas ven “solo” estudios clínicos, las naciones que saben mirar el largo plazo lo reconocen como una oportunidad de transformación. Ese es el caso de México. Compartir en Facebook Compartir Compartir en TwitterTweet Compartir en Pinterest Compartir Compartir en Linkedin Compartir Compartir en Digg Compartir